Zinemática: Críticas actualizadas

Si estás cansado de gastarte cinco o seis euros en el cine y encontrarte una y otra vez la misma apestosa mierda, éste es tu sitio. ¡Se acabó el tirar el dinero! Llega la revolución. By Puspus.

Thursday, February 22, 2007

"Cars"


“Cars” de John Lasseter. Con Owen Wilson, Paul Newman, Bonnie Hunt, Michael Keaton y Tony Shalhoub. Animación. CAL. MALA.
Visualmente impecable, la última película del tándem Pixar-Disney no podría ser, sin embargo, más decepcionante. Amontona todos los personajes cliché de este tipo de filmes: el héroe admirado por todos que deberá aprender una valiosa lección, el colega feucho e insoportable que se convertirá en su mejor amigo, la comparse femenina con la que primero se peleará para después hacerla su novia, el villano egoísta y faltón que recibirá su merecido castigo y, por supuesto, los secundarios de turno, de distintas etnias para más inri, todos algo frikies pero muy majetones. Ni un apunte original. Ni una sola sorpresa. “Cars” es tan manida y tan superñoña que dan ganas de echar las rabas, en serio. Uno no se puede creer que la misma compañía que nos legó joyas como “Monstruos S.A.”, “Buscando a Nemo” y “Los Increíbles” perpetre ahora una basura tan compacta y maloliente como ésta. Previsible, larga, aburrida, sin gracia y trufada de moralejas idiotas sobre humildad, amistad y buen rollito, “Cars” es, no ya lo peor de Disney en décadas, sino una de las más espantosas cintas del 2006. No llega a “GAL” tan sólo porque no la dobla Jordi Mollá. Aunque, bien pensado, esto quizá hasta hubiera tenido su punto...
Lo mejor: Su perfección técnica.
Lo peor: Que te han contado la misma historia como un millón de veces y en todas te divertiste más.

Thursday, February 15, 2007

"Diamante de sangre"


“Diamante de sangre” de Edward Zwick. Con Leonardo di Caprio, Djimon Houson, Jennifer Connelly y Arnold Vosloo. Aventuras. CAL. BASTANTE BUENA.
De un director como Edward Zwick, habitual en las pelis para el lucimiento del guaperas de turno (Brad Pitt en “Leyendas de pasión”, Tom Cruise en “El último samurai”, etc.), un servidor no esperaba gran cosa. Pero confiaba en que, por el hecho de enmarcarse en el continente africano y versar sobre el reclutamiento de críos y el tráfico de piedras preciosas, “Diamante de sangre” sí que ofreciera algo más que la consabida sucesión de instantáneas de di Caprio sonriendo al atardecer. Por fortuna así ha ocurrido y el filme, sin llegar a ser perfecto, sí que se eleva por encima de la media y entretiene sobradamente durante las dos horas y pico que dura. La causa hay que buscarla en el guión, pues se nota trabajado y se acerca a sus fragmentos más escrabosos con la seriedad y el respeto que estos merecen. De esta manera nos topamos con escenas como las de las amputaciones a machete o el asesinato del niño, impensables en un producto de estas características, que no olvida nunca su interés por la taquilla, pero que estan ahí, con su brutal intención de denuncia al descubierto. La música del casi siempre impecable James Newton Howard, los espectaculares paisajes africanos y la valía del señor Zwick a la hora de rodar espectaculares escenas de acción también aportan lo suyo. Y qué decir a estas alturas de una actriz como Jennifer Connelly... a mí esta chica ya me da igual lo que haga, que siempre me parece extraordinaria. No suele ocurrir lo mismo con el modelo Djimon Housou, normalmente relegado a vacías producciones de acción/aventuras pero que aquí se descubre como un intérprete cargado de talento. Leonardo di Caprio, curiosidades de la vida, debería ser el más beneficiado del trío, pues por algo toda la trama del filme se articula a su alrededor, y sin embargo, nominaciones al Oscar aparte, a mí me resulta el menos acertado de los tres. Sencillamente no me lo creo en el papel de cínico traficante de diamantes. Es esa carita aniñada, esa suave pelusa que conforma su perilla, esas mechitas doradas... Un personaje tan ambiguo y descreído como el que interpreta hubiese necesitado un actor más viejo, con mejores alforjas... hablo de Clive Owen, o Russell Crowe o incluso de nuestro “spanish friend” Viggo Mortensen. Si lo que los académicos deseaban era relanzar la carrera de Di Caprio (cosa que dudo que el muchacho necesite), ahí tenían “Infiltrados” para disfrutarle en una actuación sobresaliente y sin apenas fisuras. En ésta con nominar a Housou tenían bastante. En fin, cosas del cine. Así que, resumiendo, que “Diamante de sangre” es una buena película y con esto me estoy refiriendo a que pertenece a esa clase de pelis que gustan a todo el mundo, papis, abuelos y niños. Entusiasmar no entusiasma y también presenta sus fallos (demasiado metraje, diálogos forzados...) pero es entretenida y cumple con su cometido de desperezar conciencias. Un dinero bien invertido.
Lo mejor: El esforzado trabajo de documentación que se vislumbra en su absorbente guión.
Lo peor: Cierta previsibilidad.